Adiós.

No me es fácil decirte adiós si cada vez que cierro mis ojos te veo a ti

si a pesar de que las tentaciones persisten solo te quiero a ti

pues te amo y es lo único que me hace saber esto que siento

te amo con locura y desmedidamente y te deseo con el fervor de mi alma

y aunque fui yo la que le puso un fin a nuestra historia

aun siento lo mismo al verte, al escucharte, al saber de ti.

Me rompe el alma cada vez que recuerdo tu silueta atrás de mi

y como sabías enlazar cada instante y hacer que nuestros cuerpos siguieran el ritmo

extraño tu astucia para poder convencerme y hacerme dudar de los rumores

ansío esas llamadas diminutas donde los temas eran solo superficiales

pero aun así quise escucharte, saber algo más sobre ti

y en ocasiones sentí que buscabas lo mismo de mi

pero la vida, sus vueltas y tus circunstancias, me hicieron perder el control

y las esperanzas en lo que fue nuestro.

Aun no acepto el hecho de que pudiste defraudarme

mi confianza a ti siempre fue plena mis ojos eran ciegos ante todo

justificaba tu escasa presencia, tu desinterés en mis cosas, tus “compromisos”

ya las cosas han ido cambiando lentamente

y a pesar de que aun persisten sentimientos, pasiones x ti

el hecho de volver el tiempo y retomar un capítulo con secuelas, no es una sabia decisión

debo acostumbrar a vivir sin ti.

A penas te vi, estabas tan diferente…

Aun recuerdo como buscabas mis manos desnudas a penas y cesaba la luz
Como acercabas tu frente en mi rostro justo en la contextura de mis labios
Todo iba también por momentos sentía que todo era un sueño.

Hasta que la cruda realidad golpeo mi alma al escuchar esas palabras de tus labios, era ella tan radiante y atractiva la dueña de tus besos, era ella aquella que día y noche reinaba en tu memoria… solo ella.

Y me sentí vacía, usada y confusa, tal cual fuera una lagrima en el río, despistada y con las únicas ganas de retroceder el tiempo y no a verte conocido, con el deseo incesante de borrarte de mi mente y desaparecer todo lo que me acuerde a ti.

Eras tan diferente a lo que creí, sedujiste cada espacio de mi alma con tu caballerosidad e inteligencia y reubicaste lentamente cada pieza de mi herido corazón… Pero al final eres lo mismo que los demás un viajante en busca de aventuras y no un amor real.

Dias de Mayo.

Hoy tantas cosas han divagado por mi mente, que tal me veo, A caso me siento bien conmigo o simplemente soy otra joven más que aun vive los dias como si no hubiese un mañana. Y me pregunto: Que es lo que quiero?

Ese amor de peliculas donde conoces un "Principe Azul" que es to2 lo que anhelabas, te llena de detalles y una buena mañana aparece en tu ventana para decirte que te ama con locura...

Exitos, llenarme de fama y poder alcanzar esas metas que desde mi infancia me han hecho volar a un universo diferente...

Sentir paz, y de una vez por todas vivir cada dia como si fuese el último...

O simplemente deseo sentir lagrimas en mis ojos, sonrisas en mis labios, besos tibios, y la certeza de que tengo un motivo para soñar, anhelar y ver las cosas mas alla de lo que son... quizas eso es lo que deseo...

No se aun que pasara conmigo, aun faltan tantas cosas por descubrir, tanto por conocer, tanto por sentir, pero si estoy segura de que por mas ideas que ronden en mi mente solo algo 100pre se mantiene claro y es la fe hacia un Ser que por mas caidas, tropiezos o momentos confusos no deja de mirarme con esos ojos encantadores, esos labios que me consuelan y esas palmas que solo en mis sueños puedo tocar... DiOs y quizas sea lo unico seguro que allá en mi vida.

Aun nose que cosas puedo esperar del mañana todo están "impredecible", muchas de las cosas que en un ayer llenaban mis noches de risas, hoy son vagos recuerdos y algunos amargas memorias, personas han pasado por mi vida dejando grandes y pequeñas pisadas que protagonizaron innumerables momentos, me he enamorado e sentido un cosquilleo en mi estomago, perder el control por cuestion de segundos, entregar el ciento por ciento y una que otra vez e sufrido decepciones como también he decepcionado. E logrado algunos sueños, perdido amistades, reido a carcajadas sin tener un claro motivo, bailado con emoción y he sentido el agradable sabor de un plato recién hecho.

Hasta ahora las cosas no han ido del todo color de rosas, a veces tan brillante como el sol, en otras oscuro como la noche pero siempre conservando su esencia ese color resplandeciente y atractivo que llamamos: ViDa.