Amor a medias.

En plena soledad
Tan cerca de aquel lugar que un día fue nuestro
Arropada por la suave brisa del invierno
Que cubrían tus brazos cuando estabas a mi lado,
Hoy
Me sumerjo en el silencio de tu ausencia
En aquellos recuerdos de lo que nunca fue.

En mi interior
Una niña recluida
Clama a gritos su libertad
Aquella ingenua
Que en tu cuerpo desenlazo sus cadenas
Que en una noche desierta
Probó el trago amargo de la adultez
Entre el delirio y la pasión
Recreo caricias que desconocía
Siendo tu conocida
Tu amor a medias.

Hoy, viendo la tarde caer
Descubro como tus frecuentes llamadas se esfumaron
Como tus palabras de amor
Se han desvanecido
Pero tú recuerdo
La sagrada memoria
De tus besos,
El profundo suspiro
De una noche a tu lado
Cubrirá mi alma,
Por siempre.

Palabras nulas

Cuantas veces he vuelto a caer
En la irreprimible ignorancia
De que el sentir apremia
Presumí quererte e invente en tu memoria, retales de ilusión
¿Para qué sentir si seré juzgada?
Si eres casi perfecto y no puedo tenerte
Si por más veces que intente
Llegas y te vas.

Necesito borrarte
Eliminar de mi memoria tus breves recuerdos
Tu voz sublime y gestos superfluos,
¿Que gane tentándome a besar tus labios?
Si nunca podremos ser más que amigos
Si soy, solo soy
La instigación encarnada que abatió tu cordura.

Maldigo el día en que te conocí
Y concedí mis sentimientos en tu persona
Pues me encantaste desde el primer instante
Ocupaste mis pensamientos noche y día
Hombre de talentos, gracia latente
Proyecciones propias e ilusión indeleble
Tus ojos profundos cuan inmenso océano de efusiones,
Que apremian el desconcierto de un amor reprimido
Sin esperanzas de vida.

Que idiota fui en querer aquello que no me pertenece
En irrumpir un corazón ajeno
En descubrir la persona ideal tardíamente
Ocultar tras telones mis sentimientos por ti
Si las escazas veces que he podido tenerte a mi lado
No necesito nada más,
Con tan solo contemplarte es suficiente
Nadie más con el simple hecho de existir
De demostrarme que no eras una abstracción
Ha robado la sensatez de mis emociones
Tan solo tú, solo tú
Pudiste.

Olvidarme de ti.

Olvidarme de ti cuantas veces lo he intentado
Sacar de mi memoria tus recuerdos
Las llamadas nocturnas, tu silueta fugaz
La sencilla quimera de que nunca te irías
Pues nunca te ame, pero si te quise
Maldito cariño que te tuve.

Solo tú, deslumbraste mi inocencia
Me sentí débil en tu naturaleza de hombre
Seductor, implacable
Innato bohemio, trovador de sueños,
Ingrato e indecente
Trazaste en mi cuerpo tus manos de injuria,
Llevando mi mente a una dimensión desconocida
Vibrando en una melodía sin fin
De besos marchitos y palabras vacías
La idea de estar contigo se adueño de mis días
Siendo mí soporte, mi gran amigo
Adentrándote a rincones que desconocía.

Con tus palmas de seda, me enlazaste en tus sueños,
Tú presencia en mi mente fue mayor cada instante
Me enamorabas con tus gestos
Tu percepción de la vida
Tu humilde mirada y cálida voz
Llenaban de misterios el secreto de los dos.
Pero olvidarte se ha convertido en una necesidad
Al descubrir que tu perfección fue pasajera
A penas siento a verte conocido
Ya no eres aquel que tanto anhele
Las noches te han cambiado
Y esa luna de plata que fue nuestra confidente,
Testigo primogénita de nuestra gran pasión
Me confirma la intuición, te tengo que olvidar.

Derrota.

Fui capaz de sentarme en el banco de los desolados
Y probar el trago amargo de la derrota
Enjuagar mis ojos con lágrimas de impotencia
Y cubrir mi esperanza latente con un manto conformista.

Atrape mil sueños en un pozo profundo
Y olvidando todo aquello que profesaba
Me senté, en una esquina amontonada
Donde todos eran simples, donde nadie pedía más,
De una vez por todas fui todo aquello que odie, aquello que veía superfluo.

Cubrí mis palabras de ira e impotencia
Y hui de un mundo ilusionista que colmaba mis labios de sonrisas
Deje de amar por temor a sufrir, deje de soñar, ya no valía la pena
Hoy por primera vez escape de mi persona
Diseñando un nuevo ser incapaz, discordante
Con alma vacía, recuerdos marchitos
Y la terrible memoria de un ayer distante
De días de gloria imposibles de borrar.